FLACSO | PENT
icono de flechaVer novedades

Facebook, la gran rateada nacional y los hipócritas de siempre

Opinión 6 de Mayo de 2010

En los últimos días llamó la atención la convocatoria que realizaron los jóvenes mendocinos, a través de Facebook, para encontrarse a tomar mate y disfrutar de un día en el parque, en el horario en el que deberían estar en la escuela. Lo que se conoce comúnmente por "hacerse la rata” en Buenos Aires. ¿Habrá algún término más moderno que defina esta situación?
 
Por supuesto que las reacciones periodísticas y las reacciones a las reacciones periodísticas se han repartido en un espectro amplio. Desde los que proponen expulsiones y sanciones disciplinarias ejemplares (ya que acciones como esta nos equiparan a la categoría de republiqueta pre bananera), hasta los que pensamos ­­-sin alarmarnos- que el hecho en verdad es un fenómeno interesante y complejo sobre el cual vale la pena detenerse para deslizar algunos pensamientos.
 
En primer lugar y como lo dejé expresado en los medios por los que fui consultado, sería bueno tratar de percibir los diferentes aspectos de este fenómeno. Por un lado, tenemos la apropiación y utilización de las redes sociales. Por el otro, tenemos la relación entre los jóvenes y la escuela.
 
Empiezo con el primero de los temas. Jóvenes que se apropian de las redes sociales para difundir una convocatoria espontánea. Me parece que deberíamos estar felices de que nuestros jóvenes logren utilizar estos espacios como lugares activos. La convocatoria no tenía fines de lucro ni fue manijeada por ninguna empresa interesada en vender, ni en promocionarse ni en hacer presencia en la red. Los jóvenes, a los que se acusa frecuentemente de apáticos, desinteresados, sin ideales ni intereses han sobrepasado el uso patético que la sociedad les propone (hacé click para verle el ombligo a una modelo de Pancho Doto, hacé click acá para ganarte un peine) y pudieron generar una convocatoria genuina.
 
Claro, esta convocatoria era para faltar a la escuela, y es entonces donde aparecen las caras de consternación y espanto. Aquí es donde mejor puede entenderse la idea de que los llamados "nativos digitales", a los cuales a mí me gusta llamar "nómadas digitales", necesitan del diálogo con nosotros, los adultos, para construir un uso critico y responsable de las nuevas tecnologías. En otros tiempos también llamaba a esto la construcción del ciudadano digital. Los jóvenes se están educando, están aprendiendo, están conociendo lo que significan las responsabilidades y obligaciones y cómo hacerse cargo de ellas. Y en todo proceso de aprendizaje los errores son necesarios. Somos nosotros como adultos los que tenemos que favorecer el diálogo sobre estas responsabilidades. La fuerza punitiva no me parece el mejor camino para estimular el círculo virtuoso de jóvenes y adultos construyendo ciudadanos responsables con y en las TIC.
 
Algunas personas se muestran horrorizadas al pensar en el faltazo a la escuela. Pareciera que el hecho fundacional de toda la educación es "la presencia". Sin duda, ir a la escuela es fundamental, pero tan fundamental como la preocupación por que vayan a la escuela, es preocuparse por lo que sucede dentro de ella. Me parece que aún está muy difundida la idea que hay que ir a la escuela y que en ella se aprende por ósmosis, rigor y castigo. ¿Cuántos de los que se quejan de esta "rata nacional" están preocupados e igualmente alarmados por las lamentables condiciones que existen dentro de esas escuelas?: aulas superpobladas, edificios en estado terminal, docentes sobre exigidos y mal pagos. Lo que debería preocuparnos no es que se hagan la rata, sino que cuando van a la escuela nuestros chicos, probablemente, no encuentren ningún desafío intelectual, ninguna posibilidad de desarrollo de inquietudes. Horrorizarse por un día de rata es una gran hipocresía.
 
Estas opiniones valen en primera instancia para lo que fue la primera (y auténtica) autoconvocatoria. A partir de ésta vemos como se han reproducido y nacionalizando. En estas réplicas ya no podemos hablar de espontaneidad. Se empiezan a mezclar otros elementos (en Córdoba juntamos más que en Mendoza, y en Rosario más que Córdoba). Seguramente para las próximas convocatorias habrá más puestos de refrescos atentos a satisfacer la demanda, y dentro de poco tal vez la movida este auspiciadas por marcas de yerba mate. Todo esto no hace más que reforzar la idea de diálogo y de construcción. Seguramente estaremos perdiendo una interesante oportunidad si aplicamos sanciones colectivas. La escuela no pierde su rol formador, que es mucho más que la suma de los contenidos curriculares. El ejercicio de la libertad y la responsabilidad es un tema que debe estar presente en todas las casas a la hora de la cena.

Ultimas novedades