“Querido PENT:”

Querido PENT:

Ante todo ¡Feliz cumpleaños! ¡Felices 10 años!

PENT, te cuento que es un placer que los proyectos de formación de educadores de alta calidad  tengan larga vida y puedan así tener tiempo para madurar, crecer, evolucionar, mejorarse, renovarse, incorporar innovaciones didácticas y  tecnológicas, sumar nuevos miembros. Para hacer todo eso hace falta tiempo. Y lamentablemente no todos los proyectos educativos logran vivir  una vida larga y plena por tantísimas y diversas razones: falta de presupuesto, cambio de rumbo en las políticas institucionales, presión de las burocracias y sus burócratas, evaluaciones poco honestas, difusas y confusas que los achican o interrumpen. 

Me incorporé al PENT por invitación de mi querida colega Mariana Landau y disfruté de la tarea de los dos primeros años cuando el PENT se ofrecía sólo en la modalidad presencial. En esas dos primeras cohortes tuve el placer de reencontrarme con ex-alumnos de Tecnología Educativa de la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales y de la carrera de Ciencias de la Educación, de la Universidad de Buenos Aires, y también con quienes serían colegas en proyectos que llegarían tiempo más tarde.

A los dos años el PENT se volvió –como era de esperarse– puramente virtual y pudo escaparse así de las fronteras de la avenida General Paz y llegar a colegas que viven, enseñan, estudian y sueñan en lugares distantes de la Ciudad de Buenos Aires. Este crecimiento notable le permitió al PENT estar presente en muchos lugares y multiplicar enormemente las posibilidades de difundir nuevas ideas pedagógicas, nuevos autores, nuevas tecnologías.

Sé positivamente que muchos graduados se animan a innovar gracias a haber vivido en el PENT experiencias significativas, divertidas, alocadas, sorprendentes, desafiantes. Experiencias diseñadas con maestría y audacia, basadas en el estudio profundo e implementadas por equipos de profesionales comprometidos auténticamente con la mejora de la educación y sin temor al fracaso.

En los últimos años pude participar periódicamente de algunos coloquios y ver allí con mis propios ojos y de manera presencial la habilidad de gestión de sus coordinadores, el esfuerzo de los tutores, la emoción de los graduados, la alegría de todos por ser arte y parte de redes de educadores solventes e innovadores que demasiado lejos están de ser como a veces los diarios los/nos representan: como seres ausentes, aburridos, cansados, abatidos por la rutina y el desgano. 

Otra vez. Feliz cumple, PENT. Brindo en forma presencial y virtual por muchos años más. 

Con emoción,

Marta  Libedinsky

Marta es pedagoga, magister de la Universdidad de Buenos Aires en Didáctica y se desempeña como directora académica de la Fundación Evolución

En la imagen, Manos dibujando, la clásica litografía de M. C. Escher de 1948.