FLACSO | PENT
icono de flechaVer novedades

La educación en línea en tiempos de pandemia

Opinión 7 de Julio de 2009

Esta columna fue escrita en el año 2009 en el marco de la pandemia de Gripe A.
Para conocer nuestras últimas acciones en 2020, te invitamos a ver nuestra sección de novedades.

La emergencia sanitaria concedió existencia social a la posibilidad de estudiar utilizando los entornos de educación en línea. De pronto, y literalmente de la noche a la mañana, el Gobierno presentó un programa para que los alumnos eximidos de asistir a la escuela, pudieran utilizar la red para "aprender".
Frente a la crisis, las instituciones empezaron a reaccionar con los recursos que tenían disponibles, y al hablar de recursos no me refiero a las máquinas, sino a la capacidad institucional instalada para poder pensar cómo crear espacios de aprendizaje en la red. Muchas escuelas tuvieron que resolver en un breve lapso de horas aquello que no quisieron o no pudieron resolver durante los meses anteriores: montar la presencia institucional en la Red y cómo utilizarla con propósitos educativos. En este sentido algunas escuelas tenían más recorrido institucional y experiencia en el uso de Internet, pero otras tuvieron que aceptar, súbito, la existencia y el uso del correo electrónico.

La posibilidad de utilizar Internet para enseñar no es algo nuevo, viene promocionándose desde la época dorada de las puntocom, desde fines de los 90 cuando alguien siguiendo el espíritu de la época antepuso la "e" a learning. Desde hace diez años que convivimos con la idea de utilizar la Red para enseñar, pero aunque el tiempo histórico sea breve, hemos aprendido algunas lecciones, y adquirido algunas certezas en lo que significa enseñar en la Red.

Si pensamos en el nombre que desde el Ministerio se le ha puesto al programa de estímulo, "Aprender en casa", podríamos pensar que se trata de un nombre simplemente descriptivo, pero me parece interesante poder tener algunas reflexiones al respecto. El programa nos propone que los alumnos puedan aprender desde la casa. El acento recae sobre el que aprende. Pero ¿cómo aprendemos desde la casa? ¿La sola presencia de la computadora y la elaboración de un sitio con contenidos son suficientes para permitir el aprendizaje? ¿La lectura de pantallas interactivas genera aprendizaje? A través del sitio el programa oficial propone una batería de contenidos de documentos de lectura y de vínculos a propuestas o actividades para los docentes. La idea que subyace es que los alumnos se van a sentar frente a las pantallas a leer, y mientras leen, ese flujo de información les va a enriquecer el entramado neuronal.

Pero, al hacer el acento en el aprendizaje, el Estado está deslindándose de la responsabilidad social de enseñar en la RED, porque el aprendizaje en la Red no se da de manera automática absorbiendo el contenido de páginas o de sitios por más interactivos y vistosos que sean. Nadie puede aprender a través de la Red, si alguien no está al mismo tiempo enseñando, y enseñar en red es un proceso que se inicia con la planificación de un proyecto, pensando actividades a través de las cuales se pueda llegar a los objetivos y con el trabajo de moderación y acompañamiento que los docentes realizan de manera permanente a través de los espacios de diálogo e interacción con los participantes.
Aprender en línea es muchísimo más que la lectura. No debemos confundir el aprendizaje informal que podemos realizar por interes propio buscando información en Internet con el aprendizaje de contenidos y habilidades epsecíficas que propone la escuela.

De aquí, el trabajo docente en línea tiene características específicas que no se derivan directamente de las habilidades y capacidades que tienen los docentes que se han formado para ejercer en las aulas tradicionales. Enseñar en un entorno en línea tiene características y una práxis profesional que no se deriva directamente de la docencia tradicional. Con toda razón un docente formado no puede sentirse a gusto en un entorno en línea. Es necesario formar docentes capaces de realizar también la tarea docente en línea. Entonces, valdría la pena preguntarse cómo se han modificado los planes de estudio del magisterio para asegurarnos que los docentes que se están recibiendo hoy cuenten con las habilidades necesarias para pensar la acción docente en entornos en línea.

Probablemente, cuando se normalice la vida en las aulas se descubra que la eficacia del programa de "leer en casa, para creer que aprendemos" haya sido muy baja. Para nosotros no será una sorpresa. Pero estos resultados magros podrían servir para justificar la decisión de no seguir adelante, de no profundizar los cambios y reformas necesarias para profundizar la presencia y la obligación de las Instituciones educativas de organizar su presencia en la Red, o en el microcosmos institucional de reforzar el argumento de quienes se niegan a valerse de las TIC.

En este sentido, la aparición forzada y como política de estado de la educación en línea, conlleva además otro riesgo. Los cambios necesarios deberían apuntar tanto a llevar Internet a las escuelas, como llevar la escuela a Internet: utilizar la Internet como espacio de interacción para montar y recrear los procesos educativos. La educación en línea no sólo sirve para solucionar problemas como el de la emergencia sanitaria actual, sino que puede servir para solucionar un problema mucho más grave y permanente: al habilitar espacios de enseñanza en línea, los docentes pueden descomprimir y reducir tensiones en sus momentos de interacción en el aula para aprovechar esos momentos de contacto con los alumnos para reforzar el vínculo docente-alumno, adulto-adolescente y recrear el vínculo entre los alumnos y la institución educativa.

Para ello, es necesario un trabajo sistemático y constante, de reformas y compromiso, que por el momento sólo algunos docentes y directivos de manera individual han emprendido.

 

Esta columna fue escrita en el año 2009 en el marco de la pandemia de Gripe A.

Para conocer nuestras últimas acciones en 2020, te invitamos a ver nuestra sección de novedades.

 

Ultimas novedades