Acontece el primer milagro adjudicado a las netbooks.

Este domingo se publicó un artículo en el diario Clarín en el que como se explicita en el título, la distribución de dispositivos tecnologicos como las netbook modifican la educación. Ya hemos tocado más de una vez en esta columna el tema sobre la importancia de despojar a la tecnología la responsabilidad de ser el motor de los cambios educativos. (Y de los sociales también). Para ejemplificar este tecnocentrismo que se desprende del título de la nota me gustaría proponer algunos títulos alternos que reproducen esta misma manera de entender la relación tecnología y sociedad: 

"Llegan las nuevas pantallas de HD y ya  las intevenciones de R. Fort en la TV son iguales a las explicaciones de J. P. Feinman en Canal Encuentro". 

"Los nuevos DVD Blue Ray, hacen que las peliculas argentinas (que transcurren en balnearios desiertos en invierno, ylegg en las que los personajes se buscan a sí mismos murmurando monosílabos, con planos interminables,) ya se ven como un thriller hollywoodense". 

Y el último y más polémico sin duda: "Llegan los nuevos autos modelos 2011 y las mujeres ya cambian su manera de manejar".